Crónica de un círculo vicioso
Un monólogo. Eso es que lo que necesitas ahora. No estás pasando por un buen momento, y tal vez, un monólogo pueda llevarte al tan anhelado país de las maravillas. Mmmm...escribir también es un buen aliado.
Un monólogo y escribir, son dos buenas maneras de drenar emociones, los sentimientos...una manera inteligente de
gritar!!! y no decir groserías ni pelear. Te explico: viajar a diferentes lugares y personificar miles de personajes a través de la actuación, es maravilloso. Por eso actúas, en casa, claro, con sólo las cuatro paredes de tu cuarto como testigo. A veces usas la sala o la cocina...pero únicamente cuando estás sola.
Cuando entras en personaje, hablas contigo misma. Te haces constantemente preguntas que tú misma contestas, eso si es que tiene alguna respuesta. Comienzas a buscarlas en donde no las hay. Continúas buscándole la quinta pata al gato y te aferras a recuerdos que, por más emotivos que sean, no te volverán a ocurrir. Eso le abre las puertas a la nostalgia.
Todo con el fin de sobrevivir en el mundo real.
Estás rodeada de mucha gente, pues tienes familia, buenos amigos y a alguien especial.Con ellos compartes tu día a día. Hablas de cualquier cosa, asistes a cumpleaños, celebras las navidades, te tomas algunos vinos, comes alguna pizza un sábado por la noche, una que otra vez vives la "vida loca" cuando asistes a sitios nocturnos, bailas, cantas y estudias; como cualquier habitante de este país no tan maravilloso.
Aún así te sientes sola en medio de un montón de gente y momentos estables. No felices, estables. Porque la felicidad es estabilidad en todos los sentidos: emocional, mental, personal, familiar, social y económica.
Pero sé que eres más fuerte de lo que muchos creen. También sé que nuevamente saldrás adelante: POR TÍ. Por tus sueños, tus metas, tus ilusiones. Por tu familia, tus amigos y por ese alguien especial.
Finalmente, cuando ves los resultados de estar nadando contra la corriente, vuelves a sonreír. Vuelves a vivir! Y te sientes bien. Con ganas de comerte el mundo.
Entonces, descubres que la vida es un círculo vicioso que te pasea por mil momentos fáciles y difíciles, volviendo de nuevo a tu estado inicial. Momentos que te vuelven a sumergir en las profundidades de un estado patético en el que te sientes sola, aún cuando tienes a tu mamá a un lado diciéndote que te quiere mucho.
Es aquí en donde vuelves a necesitar de tus monólogos y de la escritura, ya que son una manera de expresarte. De exteriorizar lo que sientes.
Pobrecita. Así es la vida. Así es TU VIDA.
Un monólogo. Eso es que lo que necesitas ahora. No estás pasando por un buen momento, y tal vez, un monólogo pueda llevarte al tan anhelado país de las maravillas. Mmmm...escribir también es un buen aliado.
Un monólogo y escribir, son dos buenas maneras de drenar emociones, los sentimientos...una manera inteligente de

Cuando entras en personaje, hablas contigo misma. Te haces constantemente preguntas que tú misma contestas, eso si es que tiene alguna respuesta. Comienzas a buscarlas en donde no las hay. Continúas buscándole la quinta pata al gato y te aferras a recuerdos que, por más emotivos que sean, no te volverán a ocurrir. Eso le abre las puertas a la nostalgia.
Todo con el fin de sobrevivir en el mundo real.
Estás rodeada de mucha gente, pues tienes familia, buenos amigos y a alguien especial.Con ellos compartes tu día a día. Hablas de cualquier cosa, asistes a cumpleaños, celebras las navidades, te tomas algunos vinos, comes alguna pizza un sábado por la noche, una que otra vez vives la "vida loca" cuando asistes a sitios nocturnos, bailas, cantas y estudias; como cualquier habitante de este país no tan maravilloso.
Aún así te sientes sola en medio de un montón de gente y momentos estables. No felices, estables. Porque la felicidad es estabilidad en todos los sentidos: emocional, mental, personal, familiar, social y económica.
Pero sé que eres más fuerte de lo que muchos creen. También sé que nuevamente saldrás adelante: POR TÍ. Por tus sueños, tus metas, tus ilusiones. Por tu familia, tus amigos y por ese alguien especial.
Finalmente, cuando ves los resultados de estar nadando contra la corriente, vuelves a sonreír. Vuelves a vivir! Y te sientes bien. Con ganas de comerte el mundo.
Entonces, descubres que la vida es un círculo vicioso que te pasea por mil momentos fáciles y difíciles, volviendo de nuevo a tu estado inicial. Momentos que te vuelven a sumergir en las profundidades de un estado patético en el que te sientes sola, aún cuando tienes a tu mamá a un lado diciéndote que te quiere mucho.
Es aquí en donde vuelves a necesitar de tus monólogos y de la escritura, ya que son una manera de expresarte. De exteriorizar lo que sientes.
Pobrecita. Así es la vida. Así es TU VIDA.